
Se la considera una enfermedad rara, afecta entre 15 y 50 personas de cada un millón en el mundo y es más frecuente en mujeres
DIAGNÓSTICO, EL GRAN DESAFÍO
Antes de pensar en un tratamiento, hay que tener un diagnóstico adecuado y clasificar a los pacientes. Muchas veces cuando se desarrollan los síntomas, ya los pacientes tienen un aumento importante de la presión en las arterias pulmonares y si no reciben un tratamiento específico y adecuado pueden tener graves complicaciones.
La última clasificación clínica divide la Hipertensión Pulmonar en cinco grupos: HAP, que incluye las asociadas a enfermedades del tejido conectivo como esclerodermia y lupus, las cardiopatías congénitas, la asociada a fármacos como los anorexígenos; la HPasociada a enfermedades del corazón izquierdo, por ejemplo, por problemas de válvulas o musculo cardíaco; la HP por enfermedades pulmonares la HPTromboembólica Crónica y la HP de causas indefinidas.
Cuando exista la sospecha de la presencia de HAP es necesario complementar la historia clínica y el examen físico. El paciente debe ser evaluado por un equipo multidisciplinario, formado por neumónologo, cardiólogo, hemodinamista, reumatólogo y psiquiatra. Este equipo, con estudios como rayos X de tórax, electrocardiograma, tomografía de tórax, pruebas de función pulmonar y estudios inmunológicos, serán la base para establecer la causa de la Hipertensión Pulmonar.
Un ecocardiograma ayuda a los médicos a calcular la presión en la arteria pulmonar y otras variables que fortalecen el diagnóstico. Pero es el cateterismo cardíaco derecho el que permite un diagnóstico definitivo. Consiste en introducir un catéter desde la ingle o el antebrazo, que llega al lado derecho del corazón, para medir las presiones pulmonares.
RECOMENDACIONES Y TRATAMIENTO
El tratamiento para la HP comprende medidas generales, terapia de sostén y terapia específica. Al paciente se le recomienda evitar grandes alturas, y en el embarazo (puede aumentar la mortalidad materna), debe vacunarse contra gripe y neumonía, recibir apoyo psicológico y participación en un programa de rehabilitación supervisada. La terapia de sostén busca aliviar los síntomas y puede incluir oxígeno suplementario en casa y diuréticos para mejorar la falla del corazón derecho.
Es la terapia específica la que ha mejorado las complicaciones y la sobrevida, hay tres grupos de fármacos indicados para los pacientes con HAP, todos ellos de extensa investigación y en general de elevado costo. Finalmente, cuando la enfermedad es muy avanzada o la respuesta al tratamiento no es la adecuada, el trasplante pulmonar o cardiopulmonar es una opción, especialmente para pacientes más jóvenes y con HAP idiopática.
Asesoró: Dr. Julio Chertcoff (MN 42235), Coordinador de la sección Circulación Pulmonar de la Asociación Argentina de Medicina Respiratoria (AAMR) y Consultor del Servicio de Terapia Intensiva y Neumonología del Hospital Británico de Bs. As.